Acerca de

Acerca de mí:

Nací entre las praderas y montañas de América Central, donde el amanecer pinta de oro las cumbres y el viento susurra antiguas promesas. En aquel rincón humilde de la tierra, entre el verdor del campo y el canto de los gallos, aprendí que la grandeza no se mide por las manos que poseen, sino por las manos que siembran.

Soy hijo de una familia humilde, el menor de dos hijos de una familia cristiana, un campesino con Biblia, formado en la escuela de la naturaleza y guiado por la voz de Aquel que habló desde el Sinaí. Desde mis primeros años, la Palabra encendida fue mi lámpara y mi brújula; y el amor por la verdad, mi más fiel compañera de jornada.

Con el paso del tiempo, el Señor me llamó a escudriñar los tesoros de la Escritura con mente reverente y corazón ardiente. Así nació en mí una vocación: la de ser Teólogo Adventista del Séptimo Día, investigador y formador de líderes, amante del estudio profético y de las profundidades del mensaje eterno.

Mi pluma busca unir la teología con la vida, la doctrina con la esperanza, la profecía con la pasión. Escribo no para entretener, sino para despertar. Mi propósito no es otro que encender en cada lector la llama del entendimiento espiritual y el anhelo de la pronta venida de Cristo.

Como dijo Elena G. de White: “El estudio diligente de la Biblia ennoblece cada pensamiento, sentimiento y aspiración” (Consejos para Maestros, pág. 460). Esa es la senda que sigo: la del conocimiento que redime, la del pensamiento que se arrodilla ante la verdad, la del servicio que florece desde la humildad.

Así camino, con los pies en el polvo de la tierra, pero con la mirada en el cielo; sembrando palabras, cosechando fe, esperando el día glorioso en que el Teólogo del universo nos revele el misterio completo de Su amor.

¡Dios les bendiga Siempre!